viernes, 24 de mayo de 2013

El consumo alternativo en tiempos de crisis


Hace ya varios años que los consumidores europeos están en modo «gestión de crisis», así comienza la presentación de la undécima edición de “El Observatorio Cetelem Europeo del Consumo’’ que se acompaña por el subtítulo “Consumidores europeos en modo alternativo” (http://www.elobservatoriocetelem.es/observatorio/Observatorio-consumo-europeo-2013.pdf). 

Este informe, realizado por el Observatorio Cetelem, en colaboración con el gabinete de estudios y asesoría BIPE, utiliza una muestra de 6.500 personas que participaron en una encuesta desarrollada por Internet en 12 países europeos: Alemania, Bélgica, Eslovaquia, España, Francia, Hungría, Italia, Polonia, Portugal, República Checa, Rumanía, y Reino Unido. 

El consumo alternativo navega por canales diferentes a los tradicionales puntos de compra y venta de productos y/o servicios. Además, se caracteriza porque tiende a la reutilización de productos, ya sea a través del intercambio, mediante la cesión entre conocidos y familiares, o bien con la adquisición de productos de segunda mano o de comercio justo. 

La situación de crisis actual ha provocado cambios significativos en los hábitos de consumo de muchos ciudadanos europeos. En este sentido, el 59% de los europeos afirma no disponer de los recursos necesarios para consumir, una ratio que asciende hasta el 63% en el caso español. 

Los ajustes del cinturón se traducen en cambios tan significativos como la reafirmación del consumo responsable (priorizar el consumo de productos locales, limitar el gasto de agua, electricidad o carburante, adquirir equipamientos tecnológicos sostenibles, etc.) o la desaparición de los intermediarios, buscando circuitos más cortos para las compras. Sobre este asunto, el informe Cetelem observa que tres de cada cuatro europeos están dispuestos a comprar directamente de los productores, lo que representa un auténtico desafío para el “lobby” de la distribución a nivel empresarial. 

El trueque, otra de las fórmulas de consumo alternativo que están adquiriendo protagonismo con la crisis, también es considerado como opción de consumo para uno de cada dos encuestados. Este modelo sigue creciendo impulsado por las herramientas tecnológicas y la aparición de numerosas páginas web que contribuyen al fomento de esta práctica, por ejemplo: www.truequear.com/ o www.truequeweb.com

TRUEQUEAR.COM Tu portal de trueques

El reciclaje o recuperación de productos es otra de estas prácticas innovadoras vinculadas al consumo alternativo. La concienciación medioambiental empuja a muchos consumidores a dejar de acumular productos que, a lo mejor, ni siquiera usa y/o necesita. A cambio se pueden recuperar muebles viejos o sacados de la basura, juguetes, aparatos eléctricos… En relación con este asunto les recomiendo conocer la experiencia de Traperos de Emaús (http://www.emaus-navarra.com/index.php), una fundación sin ánimo de lucro que desde 1972 se dedica en Navarra a reducir el consumo, luchar contra el derroche y consumir responsablemente. Para ello tratan de alargar la vida útil de los objetos y hacer que vuelvan a servir para lo que fueron creados.


Este post constituye un pequeño botón de muestra de todas las posibilidades de consumo alternativo que se destacan en el informe de Cetelem. Desde aquí les animo a su lectura y a que desarrollemos, aunque sea solo un poco, hábitos de consumo mucho más responsables.

viernes, 17 de mayo de 2013

Diferentes actores de la Innovación Social


La Innovación Social no es propiedad de nadie, al contrario, por su propia concepción emana de una variedad muy heterogénea de organizaciones con diferentes finalidades y perspectivas. En el sector conviven empresas lucrativas con organizaciones sin ánimo de lucro y, dentro de estas, cohabitan microscópicas organizaciones de ámbito local con “multinacionales de la solidaridad” que disponen de delegaciones repartidas por diferentes puntos del planeta.


Pero ni tan siquiera la distinción entre organizaciones sin ánimo de lucro y empresas con afán lucrativo es tan clara ni diáfana como se pudiera discernir en un primer momento. Según Alter (2004), el espectro de matices viene determinado por la motivación organizacional, el grado de responsabilidad ante diferentes agentes y el destino de los potenciales retornos de la inversión.



Todos estos agentes no actúan aislados dentro de una cámara de hipoxia que mejore su resistencia a los avatares del mercado, sino que opera en un contexto histórico-espacial concreto, al que deben amoldar su actuación en un doble nivel: ajuste competitivo con el mercado (para obtener el nivel de eficiencia que les permita sobrevivir) y ajuste de legitimación con la sociedad, de tal manera que su actuación sea coherente con la sociedad en la que se encuentran inmersos.

Llegados a este punto se debe que advertir que no toda innovación es social ni todo lo social tiene porqué ser innovador. Vamos a ejemplificar algunas experiencias de innovación social de cada uno de los tipos organizativos propuestos en el modelo de Alter (2004), advirtiendo que la distinción no siempre es transparente, al contrario, en algunos casos habría que bucear en el alma del emprendedor para poder asegurar a ciencia cierta sí la organización pertenece a una u otra categoría.




1. Entidades sin ánimo de lucro tradicional, cuyo fin no es la consecución de un beneficio económico, sino que trabajan para el progreso de la sociedad, y que no obtienen ingresos provenientes ni de la venta de productos ni la prestación de servicios. Ejemplos hay muchos, pero en este caso vamos a destacar el proyecto de la Asociación Ventanas Abiertas de Málaga, galardonado con el Premio Andaluz al Voluntariado de la  Junta de Andalucía en su modalidad de Proyecto Innovador en Materia de Voluntariado. En el grupo de teatro "Los Sinsentidos" de esta asociación participan personas sordociegas en riesgo de exclusión y personas voluntarias que tratan de integrar y acercar la cultura a personas con menos oportunidades. Un objetivo fundamental es el de sensibilizar a los espectadores que asisten a los espectáculos que ponen en escena de que no existen límites. Una muestra de la ausencia de límites es que han establecido una colaboración con el grupo musical Funky Party Clown, con el que están preparando un concierto para sordos




2. Entidades sin ánimo de lucro pero con actividades que generan ingresos. Estas actividades pueden provenir de la venta de productos, de la prestación de servicios, de la organización de eventos... Un ejemplo  sería la venta de regalos solidarios que realiza Acción contra el Hambre, lo que les permite diversificar sus fuentes de financiación para continuar con su misión de salvar vidas enfrentándose a las diferentes causas de la malnutrición y sus efectos. En la tienda virtual de Acción contra el Hambre se pueden comprar, entre otras cosas, productos textiles, juguetes, libros, cosmética ecológica, etc.



3. Empresa social. Se trata de organizaciones capaces de mitigar una problemática social desde una lógica empresarial, esto es, gestionadas como un negocio y garantizando su sostenibilidad e independencia financiera. Un ejemplo de empresas social bajo el paraguas de la fórmula cooperativa lo constituye Crysopa, una cooperativa que reúne a varios agricultores del norte de Cáceres concienciados con el medio ambiente y con el ser humano, apostando por la biodiversidad y defendiendo la salud de los consumidores. De este modo, Barrunta Sentidos, el canal de distribución de los productos de la cooperativa, al vender directamente al consumidor final, logra garantizar y dignificar el trabajo del agricultor, mediante un pago justo por su producto, a la vez que se beneficia al consumidor al no tener que pagar el sobrecoste de un mercado viciado. La empresa nace con un compromiso de futuro, bajo la hipótesis de que otra alimentación más saludable es posible, y con el propósito de modificar un modelo de producción insostenible a largo plazo.





4. Empresas socialmente responsables. Se trata de empresas que actúan bajo los preceptos de normas y principios referentes a la realidad social, económica y ambiental de las sociedades en las que actúan. La cadena de valor socialmente responsable se construye cuando las empresas comienzan a permear sus criterios de responsabilidad social en su cadena de valor, sensibilizando y definiendo programas de acompañamiento para generar socios comerciales bajo principios éticos y de productividad. Estas empresas impregnan de RSC a todo el funcionamiento de la organización, guiándose por directrices que tienen en cuenta la solidaridad, la dignidad humana, el bien común, la transparencia, etc. A modo de ejemplo se puede citar la experiencia de Galletas Gullón que en 2012 fue galardonada como una organización modélica en cuanto a empresa ética, sostenible, transparente y socialmente responsable. El premio se fundamenta, entre otras cosas, en el desarrollo e implantación de un nuevo modelo de gestión empresarial de la galletera palentina en el que no se mida el éxito sólo por los resultados financieros, sino también por la consecución de otros objetivos éticos, sociales y medioambientales.



5. Empresas que practican la RSC, de tal manera que en se involucre a todos los grupos de interés de la  empresa: empleados, accionistas, comunidades, clientes, proveedores, etc. Por fortuna a día de hoy existe numerosos ejemplos. En este sentido, Starbucks cuenta con un sistema de verificación externa para evaluar a los agricultores y procesadores conforme a las Prácticas C.A.F.E., unas prácticas diseñadas para asegurar que el café de alta calidad sea cultivado y procesado de manera social y ecológicamente responsable, un enfoque que se extiende por toda la cadena de suministro de café. La orientación inclusiva de estas  prácticas integran a todo tipo de proveedores, desde pequeñas granjas familiares y cooperativas, hasta grandes haciendas, inclusive granjas que también muelen y procesan el café que cultivan. Además de la conservación ecológica, las prácticas C.A.F.E. se focalizan en cuatro áreas principales: calidad del producto, responsabilidad económica, responsabilidad social y liderazgo ambiental. 

6. Empresas con ánimo de lucro tradicional, aquellas que, de manera legítima, persiguen la obtención de un beneficio económico que satisfaga los intereses de sus propietarios: firmas de auditoría, entidades financieras, petroleras, constructoras, empresas de transporte... Para no ser injusto puede usted poner el primer nombre que se le venga a la cabeza. Como simple información le dejo el listado de las 25 empresas más grande del mundo según su volumen de beneficios:

1. Banco Industrial y Comercial de China
2. China Construction Bank
3. JPMorgan Chase
4. General Electric
5. Exxon Mobil
6. HSBC Holdings
7. Royal Dutch Shell
8. Agricultural Bank of China
9. Berkshire Hathaway
10. PetroChina
11. Bank of China
12. Wells Fargo
13. Chevron
14. Volskwagen
15. Apple
16. Wal-Mart
17. Gazprom
18. British Petroleum
19. Citigroup
20. Petrobras
21. Samsung
22. BNP Paribas
23. Total
24. AT&T
25. Allianz

martes, 14 de mayo de 2013

La "Insecticultura" una oportunidad de negocio en la base de la pirámide

¿Se imagina usted degustando un sabroso revuelto de saltamontes? Solo de pensarlo produce repugnancia en los países occidentales. ¿Verdad?

De todos los tipos de innovación social la más compleja es sin lugar a duda la cultu-innovación, esa innovación social que implica modelar las conductas y comportamientos que han conformado la forma de actuar "socialmente aceptable". Cambiar los hábitos y costumbres arraigados en el cerebro de los seres humanos tras millones de años de evolución no es tarea baladí.

A pesar de ser conscientes del rechazo gastronómico que ello genera en la cultura occidental, un informe de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) insta a comer insectos para combatir el hambre, apoyándose en que son nutritivos, económicos y «hasta deliciosos», de tal manera que podría llegar a convertirse en la solución al hambre, a la obesidad en incluso a muchos de los problemas que afectan al medio ambiente, dado que limitaría el uso de pesticidas en la agricultura.


Si no ocurre algún cataclismo inesperado, a mitad del siglo XXI pisarán el planeta tierra más de 9.000 millones de habitantes. Para alimentar a toda esta gente habría que duplicar la producción actual de alimentos, algo que resulta materialmente imposible dada la superficie cultivable que existe actualmente. Según el informe de la FAO, casi 2.000 especies de insectos forman parte de la dieta tradicional de unos 2.000 millones de personas en el mundo. Los más habituales en este tipo de menú gourmet son los escarabajos (31%), las orugas (18%), abejas, avispas y hormigas (14%) y saltamontes, langostas y grillos (13%). Sin embargo, en el resto del planeta se desaprovecha (y hasta repugna) este recurso que ofrece la naturaleza y que constituye una fuente importante y fácilmente accesible de alimentos nutritivos, con un alto contenido en proteínas, vitaminas, fibras y minerales.



Pero es que, además, criar y recolectar insectos de forma sostenible constituye una actividad empresarial dirigida a la población más pobre, ofreciendo una oportunidad de negocio en la base de la pirámide. Revalorizar y explotar el potencial de los insectos como alimento, y también como pienso, reúne algunas de las características fundamentales de los negocios en la base de la pirámide, a saber:




a) Modelo de negocio sostenible y responsable, que crea valor para la comunidad.

b) Que propone una solución innovadora para acabar con la desnutrición en el mundo.

c) Que va dirigida a la integración de los colectivos empobrecidos.

d) Donde se contempla la triple bottom line: impacto económico, social y medioambiental.

e) Replicabilidad del modelo de negocio, de tal manera que es fácilmente extrapolable a las comunidades más pobres de cualquier rincón del planeta.


Los insectos forman parte de la dieta humana desde hace mucho tiempo, y su consumo resulta habitual en una gran cantidad de pueblos y culturas. Pese a los problemas gastrointestinales que a título individual pueda generar esta dieta a cada uno, nadie puede poner en duda que el informe de la FAO constituye un claro ejemplo de cultu-innovación, una propuesta innovadora y volcada en la resolución de serios problemas que afectan a la sociedad.



   !!!BUEN PROVECHO¡¡¡


El tiempo dirá si la sociedad se chupeteará los dedos, o no, con esta propuesta de innovación social de ámbito cultural. 


Hasta entonces... 

lunes, 13 de mayo de 2013

Wayra, la aceleradora del grupo Telefónica

Inicio“El mundo está repleto de empresas no concluidas en la forma de proyectos que podrían haber sido exitosos, si solamente en un momento preciso, la paciencia de alguien se hubiera convertido en una activa impaciencia”. Robert Updegraff. Conscientes de que muchas ideas se quedan en el limbo de los proyectos inacabados, el grupo Telefónica creó Wayra (http://wayra.org/es), una aceleradora de negocios que ofrece un ecosistema de apoyo a disposición de los innovadores en el ámbito digital, con la intención de promover la innovación y la detección de nuevos talentos en los campos de Internet y de las nuevas tecnologías.

Los tecno-innovadores encontrarán en Wayra asistencia:

a) Financiera: los proyectos seleccionados recibirán durante los seis primeros meses una horquilla de financiación entre 30.000 y 70.000 dólares, dependiendo del nivel de maduración y necesidad del proyecto. Asimismo, asistirá a estas empresas en la búsqueda de otras fuentes de financiación: ayudas, subvenciones, Bussiness Angels, mentores, partners... 

b) Gestión: administrativa, legal, formación...

c) Tecnológica: posibilidad de acceder al know-how tecnológico del grupo Telefónica en áreas tan innovadoras como las comunicaciones del futuro en movilidad, virtualización, elastic cloud computing, smart cities y smart grids, realidad aumentada, etc. 

d) Física (espacio Wayra): Wayra pone a disposición de los proyectos seleccionados un entorno de trabajo que incluye el uso del espacio, las infraestructuras básicas y el soporte administrativo necesario.




En la actualidad hay una convocatoria abierta hasta el 26 de mayo para conseguir un hueco en alguna de las Academias Wayra repartidas por Europa y Latinoamérica que ofrecen plazas disponibles en esta convocatoria.


En la actualidad 234 startups están recibiendo el apoyo de Wayra en diferentes áreas (http://wayra.org/es/startup): aplicaciones móviles, M2M, e-health, e-commerce, smart cities, apps y juegos...

En el campo de la innovación social, 15 proyectos se están beneficiando hoy día de las posibilidades que ofrece Wayra, algunos tan originales como EmoSpeech, una plataforma para reconocer y predecir emociones del habla o Pollito Inglés, una Red Social para Madres basada en el intercambio de artículos usados de bebés de 0 a 5 años.

Desde aquí les deseamos mucha suerte a todos.

viernes, 10 de mayo de 2013

Tendencias sociales a la espera de innovadores sociales

Aunque en tiempos de crisis a todos se nos llena la boca de la palabra innovación, ese mantra que se repite hasta la saciedad en los medios de comunicación, en las tertulias económicas, en los foros políticos y empresariales… lo cierto es que innovar no es algo nuevo, sino que se trata de un proceso continuo desde que el mundo es mundo. 

Muchos de los avances que se han producido a lo largo de la historia han venido acompañados de la mano de personas emprendedoras con una gran capacidad de innovación. A veces la innovación se sustenta en novedosos inventos técnicos sobre los que se ha propulsado el nacimiento y desarrollo de empresas exitosas. Algunos ejemplos destacados son Thomas Alva Edison (quien patentó cientos de inventos y que en 1880 fundó General Electric, una empresa que hoy día cuenta con cientos de miles de empleados repartidos por todo el mundo), Alexander Graham Bell (aunque no está claro si finalmente fue él o Antonio Meucci el que inventó el teléfono, lo que sí es una certeza absoluta es que creó la Bell Telephone Company, el germen de la actual AT&T) o, más recientemente, Bill Gates (Microsoft) o Steve Jobs (Apple) constituyen otros claros ejemplos de innovación vinculada al desarrollo tecnológico. 



La voluntad de emprender se puede estimular desde los entornos que inciden sobre la figura del emprendedor: familiar, educativo, institucional o empresarial. En definitiva, se trata de que la opción de ser empresario se perciba socialmente como una elección de éxito, un modelo a imitar. Hoy por hoy, desde todas las instancias sociales se apuesta por la dinamización del espíritu empresarial. La figura del emprendedor está bien vista e incluso hay huecos en la competitiva parrilla televisiva para programas que tratan este asunto. 

La clave se encuentra en destapar el frasco de las ideas empresariales, en despertar la creatividad y el ingenio de la gente. Un mito a derribar en este sentido es que un proceso creativo no es necesario que vaya asociado al desarrollo de una invención, aunque ésta, si se logra, puede reportar pingües beneficios. ¡Qué se lo digan si no a Edison, Bell, Gates o Jobs!

Pero la principal fuente de ideas  no es otra que detectar necesidades sociales insuficientemente atendidas, y que el emprendedor sabe cómo resolver. El elemento crítico reside, por tanto, en la observación de necesidades sociales. Ahí germina la creatividad del innovador. Por supuesto, no se debe olvidar que las necesidades sociales son cambiantes. Por ejemplo, el auge de las empresas de comida rápida viene motivado por las transformaciones del modelo familiar tradicional. ¡Qué duda cabe que esta necesidad no era tal cuando sólo trabajaba un cónyuge, generalmente el marido! La introducción de esta idea empresarial en la década de los sesenta hubiera fracasado estrepitosamente, mientras que veinte años después supuso un gran éxito empresarial. Esta reflexión nos alerta de un grave peligro: las ideas tienen fecha de caducidad, por consiguiente, los conceptos de negocio hay que actualizarlos, adaptándolos a las nuevas realidades sociales. De este modo, la actitud creativa no se circunscribe a los nuevos emprendedores, sino que es un test que permanentemente tienen que superar llas organizaciones (lucrativas o no lucrativas) ya implantados en el mercado y la sociedad.

En este sentido, la Comisión Europea nos apunta cuáles son las tendencias sociales que dibujara el futuro en los próximos años. 

1. Tendencias demográficas: migraciones y envejecimiento de la población europea.

a) Migraciones. Las Naciones •Unidas estiman que cerca de 200 millones de personas vivían en 2005 fuera de su país de nacimiento. Un tercio de esos emigrantes residen en Europa, pese a que la población europea supone únicamente el 8% de la población mundial.

b) Envejecimiento. A mitad del siglo XXI la edad media en Europa alcanzará los 52,3 años, frente a los 37,7 años de 2003. En esta línea, la ratio de jubilados europeos se duplicará de aquí a 2050, hasta situarse en el 54%..

2. Tendencias medioambientales: agua, cambio climático y energía

El 20% de las aguas en superficie corren un gran riesgo de contaminación, el 60% de las ciudades europeas sobreexplotan sus aguas subterráneas y uno de cada dos humedales está en peligro.

El calentamiento global se traducirá en importantes pérdidas en términos de PIB para la economía europea (entre 20 mil millones de €  para el escenario de 2,5 ° C y 65 mil millones de € para el escenario de 5,4 ° C).

La UE ha fijado objetivos muy ambiciones para llegar a convertirse en una economía de bajas emisiones de carbono, conocidos como objetivos 20-20-20. Todo ello se traduce en oportunidades vinculadas al desarrollo de las energías renovables.

3. Tendencias en relación con la comunidad: diversidad y soluciones tecnológicas dirigidas a la nueva comunidad (sociedad digital)

El 83% de las empresas europeas que disponen de políticas de diversidad consideran que las mismas generan beneficios empresariales, entre otros la posibilidad de resolver los problemas asociados a la  escasez de mano de obra en algunos países o la mejora de la reputación y posicionamiento en la comunidad.

Algunos datos sugieren que 150 millones de europeos (alrededor de un 30%) nunca han utilizado Internet. Este grupo está compuesto principalmente de personas con más de 65 años. En este campo son bienvenidas todas las iniciativas dirigidas a eliminar esta brecha digital de tal manera que estas personas puedan participar en la sociedad digital (que incluye servicios de interés directo para ellos, tales como e-learning, la administración electrónica, la sanidad electrónica...) y aumentar así sus posibilidades de empleo y calidad de vida (Agenda Digital Europea).

4. Tendencias relacionadas con la pobreza: pobreza, exclusión social y pobreza infantil

Europa es una de las regiones más prósperas del mundo. Sin embargo, la pobreza sigue siendo un gran problema que afecta a unos 84 millones de personas. Esto significa que uno de cada seis europeos vive por debajo del umbral de la pobreza, con unos 7 millones de personas que sobreviven con menos de 5 € al día según la Comisión Europea. 

 Los niños (0-17) presentan un índice particularmente alto de la pobreza (sobre el 25%, frente al 16,4% de la población total). La pobreza es también especialmente acuciante entre los grupos en situación de exclusión social, especialmente los rumanos, los inmigrantes, los indocumentados, las personas sin hogar...

5. Tendencias en salud y bienestar: inequidades relacionadas con la salud, la felicidad y el cuidado

En 2008, la industria sanitaria consumió aproximadamente un 9% del total del PIB en los países más desarrollados de la OCDE. 

La brecha sanitaria que existe entre diferentes regiones europeas es inaceptablemente grande, existiendo grandes y en algunos casos crecientes, desigualdades entre países. 

6. Tendencias relacionadas con los bienes y servicios éticos: comercio justo y producción local

Los consumidores gastaron en 2010 4.360 millones de € a nivel mundial en productos de comercio justo, lo que supuso un aumento del 28% en comparación con el año 2009.


Estas tendencias sociales se encuentran a la espera de innovadores sociales que las pongan en valor. 

¡¡Aprovechémoslas!! 

miércoles, 8 de mayo de 2013

E-empowerment de empresas sociales (V): asesoramiento y acompañamiento

La última de las funciones de empowerment proporcionada por las Organizaciones Promotoras del Emprendimiento Social (OPES) es el asesoramiento y entrenamiento a los nuevos emprendedores. Pero esta tarea de asesoramiento es muy amplia: preparación de planes de negocio, apoyo a la consecución de fondos, planes de formación continua, etc. Dada la gran variedad de opciones de asesoramiento que existen, este apartado se centra en aquellas actividades de asesoramiento que incentivan el crecimiento de las empresas sociales, y que no coinciden con las iniciativas ya expuestas en los post anteriores: el apoyo financiero, la creación de redes, y la formación. En concreto, a continuación se analizan los bancos de ideas, las microaportaciones de todo tipo de recursos bajo la modalidad del crowdsourcing (contribuciones voluntarias) y el empowerment a través de la promoción de las empresas sociales.

a) Banco de ideas

Toda iniciativa empresarial necesita una idea que la sustente. Sin embargo, las buenas ideas de negocio escasean. Un espacio apropiado para inspirarse es ideas4all (www.es.ideas4all.com). Esta web aporta un espacio virtual donde las personas con ideas (ideators) pueden compartirlas con la comunidad; o donde los individuos que necesitan una solución para resolver un problema o desafío social (questors) pueden encontrar la respuesta correcta. El tercer pilar de esta estructura lo configuran los navigators, personas localizadas en cualquier lugar del mundo que participan en esta actividad cerebral global expresando sus opiniones. Esta comunidad planetaria de pensamiento, basada en la conectividad virtual, constituye una enorme fuente de ideas para los potenciales emprendedores sociales. Una descripción de las más de 80.000 ideas que hoy forman parte de esta comunidad se encuentra disponible en la siguiente dirección web: http://www.es.ideas4all.com/buscar/concept_search. En el siguiente video se explica cómo funciona esta iniciativa.




Otro banco específico de ideas para los emprendimientos sociales se encuentra disponible en Socialnest (www.socialnest.org): una comunidad que reúne a profesionales, empresas, universidades y escuelas de negocios comprometidas con la mejora de la sociedad y las propuestas por un mundo mejor, aportando conocimiento y experiencia en la puesta en marcha de iniciativas sociales. De hecho, esta red de grupos de interés ejecuta sus mecanismos internos como una exclusiva incubadora de empresas sociales, promocionando la gestión de redes de contacto y proporcionando herramientas útiles para los emprendedores.

b) Provisión de recursos y desarrollo de herramientas

Desde la concepción de la idea hasta la realización de la misma en el mercado existe un largo camino que no todos los emprendedores sociales son capaces de recorrer. Por ello, la obtención de recursos y herramientas de desarrollo para apoyar la concreción de ideas resulta una contribución muy valiosa. En este sentido, Social Creative (www.socialcreatives.com) ofrece a los emprendedores sociales una variedad de herramientas y programas para mejorar sus empresas: metodologías, libros, talleres, concursos, etc. Esta iniciativa está patrocinada por el Global Youth Fund, una ONG canadiense fundada en 2005 por Charles Tsai y Amy Eldon, con el apoyo de la Creative Visions Foundation.



Pero quizás las experiencias más innovadoras en la prestación de recursos y herramientas para emprendedores sociales están constituidas por aquellas que movilizan microaportaciones de todo tipo de recursos, las conocidas como iniciativas de “crowdsourcing”. La falta de medios provoca que muchos pequeños emprendedores no puedan probar la viabilidad de sus ideas en el mercado. La fortaleza del crowdsourcing radica en que se elimina este obstáculo, evitando muchos de los errores –algunos de ellos irreversibles– que suelen cometer los emprendedores noveles. Las plataformas de crowdsourcing que están surgiendo a través de la Internet constituyen, por sí mismas, OPESs de e-empowerment social donde el emprendedor (ya sea este pro-social o pro ánimo de lucro) puede obtener información y asistencia de forma gratuita o a muy bajo coste. Algunas de las experiencias de mayor éxito son los casos de Quirky (www.quirky.com), GeniusCrowds (www.geniuscrowds.com), y Kickstarter (www.kickstarter.com). Esta última es una plataforma de e-empowerment para inventores, artistas y otras personas creativas que pueden testar sus ideas y conceptos sin asumir riesgos. En la mayoría de los casos el funcionamiento es sencillo: una persona expone una idea a la comunidad para que esta vote y exprese sus opiniones. Al mismo tiempo, paneles de expertos integrados por personal de los propios sitios web, minoristas y fabricantes, realizan sus propias revisiones y selección de los candidatos potenciales.


Funcionamiento de Quirky.com

En la esfera socioeconómica, el crowdsourcing se ha etiquetado de muchas maneras: producción comunitaria, conocimiento colectivo, innovación abierta, colaboración en masa, redes humanos inteligentes, etc. El concepto generalmente aceptado está más bien orientado a la acción de la externalización de una serie de tareas, tradicionalmente realizadas por un empleado o un contratista, a un gran grupo de personas o a la comunidad (masa) a través de un llamamiento social virtualmente abierto y masivo gracias a las plataformas online. El enfoque de crowdsourcing se ha dividido en categorías tales como cloud work (red de recursos, trabajo y colaboración humana), crowd creativity (el esfuerzo conjunto para promulgar la creatividad colectiva), crowdfunding mencionado anteriormente, distributed knowledge (la difusión del conocimiento en red) y, finalmente, open innovation (la determinación abierta de los miembros de la red para contribuir a la identificación y desarrollo de ideas innovadoras en un intento por encontrar soluciones creativas para sus propias comunidades).

Samasource (www.samasource.org) ejemplifica claramente el modelo de crowdsourcing ofreciendo una amplia variedad de servicios tales como la obtención de imágenes de alta calidad y resolución, la redacción y edición de contenidos, la verificación y desarrollo de bases de datos, la edición de audio y transcripción de videos, y así sucesivamente. Esta organización hace uso de una red internacional de socios de los que recauda contribuciones a pequeña escala de tiempo y trabajo. Otra organización de promoción al emprendimiento social es Ioby (www.ioby.org). Este proyecto es una plataforma de e-empowerment que conecta a personas de ideas innovadoras relacionadas con el cambio medioambiental, con los usuarios e inversionistas requeridos para que dichas transformaciones sociales cobren vida. Otro caso destacado es Sparked (www.sparked.com), una plataforma ideada para la colaboración colectiva entre emprendedores e instituciones sociales. Su red de contactos hace posible que la comunidad participe en proyectos sociales a través del voluntariado y la movilización de recursos. Sparked reúne a personas, preocupadas por el cambio social para proponer soluciones innovadoras y sostenibles. Los retos a resolver son pequeñas actividades o proyectos que la comunidad generalmente enfrenta conjuntamente y en forma virtual. La suma de pequeños esfuerzos contribuye a la concepción y desarrollo del movimiento de emprendimiento social en temas tales como el uso de las nuevas tecnologías, la promulgación y establecimiento de marco regulatorio, estrategias, el marketing y herramientas de publicidad, diseño de proyectos, etc.



Una iniciativa integradora de crowdsourcing conocido como Goteo (www.goteo.org) ha irrumpido recientemente en el sector social en España. Esta inspiradora plataforma es una red distributiva de colaboración –provee e intercambia servicios, infraestructuras, microtareas, etc.– que ofrece recompensas individuales y retornos colectivos en pro del desarrollo de la sociedad y del conocimiento libre. Goteo constituye una vía creativa de impulsar proyectos sociales y de brindar oportunidades a los individuos y pequeñas organizaciones que aspiren a implementar sus propuestas sociales en el mercado de manera sostenible y duradera. La colaboración de los participantes se puede hacer ejerciendo diversos roles: a) los Drivers son los promotores de los emprendimientos que aportan visibilidad a los principios y proyectos compartidos, y que se involucran desde el principio en la comunidad potencial en red; b) los Co-financing agents que contribuyen monetariamente a los proyectos a cambio de beneficios colectivos y/o recompensas individuales; y c) los Collaborating agents que proporcionan los recursos –tiempo, energía y/o habilidades– con el fin de ayudar a perfeccionar las iniciativas sociales y de promover la generación de cambios positivos en la sociedad. A la luz de esta filosofía, Goteo ha superado el mínimo de crowdfunding necesario para poner en marcha el proyecto Bookcamping (http://bookcamping.cc), una biblioteca libre, abierta y de colaboración que aspira a hacer brotar la cultura desde la creación de redes sociales. Además, los promotores de Bookcamping se han beneficiado del trabajo colaborativo a través de Goteo: programadores para desarrollar códigos fuente, beta-testers para comprobar la usabilidad del software y proponer sugerencias para su mejora, o los editores que colaboran registrando, editando y ampliando el fondo de la biblioteca. En compensación, estos colaboradores obtienen retornos de naturaleza colectiva –una biblioteca gestionada colectivamente y accesible a todo el público con licencias libres– y algunos otros de tipo individual: pósteres, mención en los créditos, sesiones de asesoramiento personalizado por parte de profesionales en el campo de las licencias libres, ediciones, etc.

c) La promoción de la imagen y la publicidad en las empresas sociales

Además de tener y desarrollar una idea de negocio, toda iniciativa empresarial debe saber cómo comunicarla al mercado. En este sentido, el caso de la empresa de medios de comunicación social Xul (www.xul.es) es paradigmático (Iturbe-Ormaetxe et al., 2010). Desde su creación en 1996, esta compañía se ha destacado por su fuerte compromiso social, el cual se ha traducido no sólo en el tipo de clientes a los que asiste, sino también en su comportamiento y la autogestión.

El modelo de negocio de Xul representa a la perfección los conceptos en boga en el Cuarto Sector; es decir, el conjunto de organizaciones que tratan de vencer la tradicional separación entre el primer sector (privado), el segundo (público) y el tercero (el de las organizaciones sin fines de lucro) para integrar los aspectos sociales y económicos a sus principios organizativos (Jiménez y Morales, 2011). Su preocupación ética es una característica omnipresente, ya que la propia empresa se ve como una herramienta para ayudar a crear y desarrollar una sociedad más justa. Imbuido de esta filosofía, Xul desarrolla sus servicios de comunicación y marketing alrededor del mundo asociativo y la economía solidaria. Esta conexión emocional con ciertos colectivos específicos de la economía social permite realizar una oferta más concreta que cubre determinadas oportunidades o nichos de mercado.

Esta compañía transmite su compromiso con la sociedad y desempeña su labor con cierta humildad, en el sentido de que no se manifiestan actitudes ambiciosas para ganar cuota de mercado a través de estrategias innovadoras. El concepto tempered radical define muy bien su marcado enfoque innovador: el cambio se realiza todos los días y desde dentro de la organización. Por consiguiente, no se trata de llegar primeros a un mundo diferente, sino de llegar a la meta en compañía de otras personas y empresas.

Otro organización de e-empowerment que se ocupa de la “socialización” de proyectos empresariales es H3S Social Consultants (www.h3s-sroi.com). Esta OPE es una consultora española especializada en la medición del valor o impacto social (Narrillos, 2010; Emerson, 2001). Para ello se utiliza principalmente el Método del Retorno Social de la Inversión (SROI). Esta reciente técnica supone uno de los modelos de crecimiento más rápidos en el campo de la responsabilidad social corporativa, ya que permite la medición del valor extra-financiero de los recursos invertidos, para ser precisos, el valor ambiental y social que no se refleja en los estados financieros convencionales.

En el plano internacional habría que destacar el asesoramiento en comunicación suministrado por la organización Media Cause (www.mediacause.org), que actúa como una plataforma virtual que utiliza el crowdsourcing como mecanismo de e-empowerment. Media Cause reúne a profesionales de la publicidad, el marketing y los medios de comunicación para obtener una interacción activa, voluntaria y de colaboración entre diferentes agentes, mejorando la imagen y comunicación de las campañas efectuadas por emprendedores sociales.


domingo, 5 de mayo de 2013

E-empowerment de empresas sociales (IV): Gestión de la formación


En la cuarta entrega de este post hablamos de la importancia de la formación, un elemento crítico para navegar con garantías en las procelosas aguas por donde discurre el siglo XXI. Tener una gran idea –por muy social que esta sea– no garantiza su puesta en funcionamiento ni, por supuesto, que las personas que asumen el liderazgo de estas iniciativas sociales posean los conocimientos y habilidades necesarios para gestionar la estructura organizativa requerida para cumplir con éxito la misión del emprendimiento. De hecho, los resultados del GEM-2009 (Global Entrepreneurship Monitor) muestran que, a diferencia de lo que sucede en otros países, España presenta una baja participación de las personas con educación superior en el sector social. Este estado de la cuestión hace que la ejecución del papel del emprendedor sea mucho más difícil y arriesgada. Prueba de ello es la alta tasa de mortalidad de nuevas empresas –entre el 20% y el 80% en los tres primeros años de vida–, que es significativamente más alta que entre los emprendedores con más formación y experiencia de gestión, donde la tasa de mortalidad no supera el 20% (Veciana, 2005).

Conscientes de la falta de formación, las incubadoras tradicionales ofrecen entre su gama de servicios programas para potenciar nuevas habilidades de gestión de emprendimientos: no se trata de aprender a ser empresario (algo que quizás se lleve en el código genético del emprendedor), sino de ser instruidos en las competencias de gestión y habilidades, finanzas, gestión de recursos humanos, técnicas de negociación, liderazgo, etc.


El aumento de los negocios sociales ha llevado a la proliferación de programas de formación “presencial” diseñados ad hoc por prestigiosas universidades, tanto a nivel internacional (por ejemplo, el Programa Ejecutivo en Emprendimiento Social de Stanford: www.gsb.stanford.edu/exed/EPSE/index.html), como nacional (por ejemplo se puede consultar el programa de la Escuela de Negocios Deusto, que posee un título específico en Innovación y Emprendimiento: www.innovandis.deusto.es/).



Varias de estas instituciones han unido sus fuerzas en la red Social Enterprise Knowledge Network (SEKN), mientras que otras universidades han fundado sus propias organizaciones, como por ejemplo el Centro Skoll para el Emprendimiento Social de la Universidad de Oxford:       

Sin embargo, la mayoría de los programas de formación presencial están dirigidos –a nivel de grado– para estudiantes universitarios sin experiencia en el mundo de los negocios o –en el nivel de graduado ejecutivo– para gerentes de empresas sociales con ciertas características y dimensiones económicas. En ocasiones se otorgan becas para pagar el elevado coste de estos cursos. En consecuencia, tales programas formativos resultan prohibitivos para la mayoría de los pequeños emprendedores sociales, ya que estos no disponen ni del tiempo, ni de la capacidad de gestionar, ni de los recursos económicos para financiar estos programas. Es en este punto donde el e-empowerment que hace posible Internet juega, una vez más, un papel decisivo como hábitat saludable, al permitir a los empresarios sociales potenciar sus habilidades gracias a la flexibilidad del espacio, del tiempo y del ritmo necesario dadas las circunstancias.

En la web, numerosas herramientas de capacitación están disponibles hoy en día para emprendedores sociales. Por ejemplo, la United Nation University for Peace –UPEACE–ofrece un curso específico en línea llamado Emprendimiento, Innovación y Cambio Social (http://www.upeace.org/news/activity.cfm?id_activity=741). Este programa está diseñado para gerentes y personal de organizaciones sin ánimo de lucro, empresarios sociales, ejecutivos de negocios con conciencia social y líderes innovadores del sector público. En el contexto español, la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) imparte un MBA en emprendimiento social (www.uoc.edu). 

Posiblemente, la mejor fórmula utilizada para capacitar jóvenes emprendedores sociales no es la presencial ni tampoco la virtual, sino un modelo mixto en el que, después de identificar a estos líderes del cambio, se les invite a participar en un proceso de capacitación intensiva para poner a disposición todo un ecosistema de e-empowerment (grupos de co-creación, recursos virtuales, tutorías, redes de contacto y trabajo conjunto, etc.) que acompañe al emprendedor social en el duro camino del desarrollo y ejecución de proyectos, facilitando la supervivencia de la empresa en sus primeros años. Este es el método que emplea Ashoka a nivel internacional a través de su programa Young Changemakers (www.concursocambiatumundo.org/). Esta iniciativa ofrece talleres, formación para desarrollar planes de acción, capital semilla, apoyo, y –más importante aún– el acceso a una red global de cerca de 3.000 jóvenes Changemakers en 20 países. Un jurado selecciona aquellos proyectos que destacan por su potencial para generar un mayor impacto en la comunidad. De este modo, el mexicano Rafael Salas fue capaz de iniciar su negocio ideando, para aliviar el problema de la vivienda en las zonas más pobres de América Latina, maneras de reutilizar los residuos generados en las zonas más ricas de esos países, y construyendo viviendas dignas y ecológicas para los menos afortunados beneficiando así al planeta en su conjunto.



Algo similar es lo que hacen en el Unreasonable Institute, acelerando el desempeño de los emprendedores asistidos y sus emprendimientos (www.unreasonableinstitute.org). Cada año, esta iniciativa reúne a emprendedores de todos los rincones del mundo para convivir bajo el mismo techo durante seis semanas en la ciudad de Boulder, Colorado. Durante este tiempo, estos futuros empresarios sociales reciben capacitación y construyen vínculos relacionales a largo plazo con más de 50 mentores, que van desde el ex director gerente de inversiones de Google, hasta el director de tecnología de Hewlett Packard. Unreasonable Institute actúa durante el proceso como puente de cientos de inversionistas y socios potenciales, de tal forma que los emprendedores establecen relaciones con más de 20 fondos de inversión, recibiendo asesoramiento legal y consultoría de diseño.



A partir de esta experiencia, muchos empresarios como Cynthia Koenig, co-fundadora de Wello, han logrado establecerse en el mercado. A través de la unión de un diseño de producto sencillo (una rueda hidráulica o turbina de agua) y un modelo de negocio innovador, Wello mejora el acceso global al agua y reduce las cargas físicas y el tiempo de recolección de agua. Este modelo de negocios ha dado como resultado una mejor salud para las comunidades, la visibilidad e implicación de la mujer, el acceso a la educación y la generación de ingresos sostenibles. Wello es una empresa social híbrida: por un lado, la parte con fines de lucro genera ingresos mediante la venta de sus “Norias” y la venta de espacios publicitarios en el exterior de estas unidades; por otro, la parte sin ánimo de lucro de Wello consiste en la creación de conciencia sobre la crisis mundial del agua potable y en educar a los usuarios finales sobre los beneficios de la misma.


En el contexto europeo hay que mencionar la iniciativa de ESADE y el Banco BBVA dirigida a estimular el espíritu social emprendedor en España a través del Proyecto Momentum (http://momentum-project.org/es)[vi]. Para cumplir esta meta, Momentum mantiene dos líneas prioritarias de actuación: el desarrollo de un programa para consolidar y aumentar el impacto de los emprendimientos asistidos y la creación de un ecosistema para promover emprendedores sociales. En cada edición anual del programa son seleccionados diez proyectos que han demostrado su viabilidad, impacto y la capacidad potencial de crecimiento. 

Momentum Project - Un ecosistema de apoyo al emprendimiento social

El ecosistema para inspirar al emprendedor social incluye talleres de formación en ESADE, la preparación del plan de desarrollo empresarial (a través de diez semanas intensivas de aprendizaje y la colaboración con un equipo de estudiantes ESADE/BBVA, mentores y patrocinadores corporativos de los emprendimientos…) y, por último, la redacción definitiva del plan de negocio. Posteriormente se presentan las iniciativas durante el evento El Día de la Inversión Social. Los diez emprendimientos seleccionados para participar en la edición de este año pueden consultarse en el siguiente ENLACE.

Todo esfuerzo es poco para lograr que los jóvenes líderes sociales fortalezcan sus conocimientos, desarrollen habilidades, accedan a nuevas redes de contactos y, en definitiva, aboguen por sus causas sociales.